La energía es una fuente indispensable para la supervivencia y él desarrollo humano. Ha sido, es, y será el motor principal de nuestra base económica, de nuestro desarrollo y de nuestro futuro. Antes de la revolución industrial, la energía requerida se obtenía principalmente de lo que se conoce como Biomasa (los recursos naturales que se tenían al alcance).
La invención de la máquina de vapor, la cual transformaba calor en movimiento, propició el inicio de una nueva era mundial, de mayor prosperidad y de un crecimiento económico exponencial nunca ante visto.
Este tipo de energías se están desarrollando a nivel mundial desde hace ya bastante tiempo (Biomasa desde el descubrimiento del fuego, Eólica para los molinos de viento e impulso de barcos), pero solo hasta la década de 1970 fue que se vio un avance significativo en su desarrollo en los países industrializados por la escasez de los recursos fósiles, principalmente del petróleo.
Estas nuevas fuentes de energía fueron primordiales para el desarrollo económico y social que vivimos hoy día, pero también son las principales causas de la situación ambiental existente, donde el efecto invernadero creado por las descontroladas emisiones de dióxido de carbono y otros gases nocivos generados por el uso de estos combustibles, a la atmosfera, generaron un desequilibrio ambiental que si no se controla puede llevarnos al fin de nuestros días.
Uno de los métodos para poder controlar este efecto invernadero, radica en la utilización de fuentes de generación de energía libres de estos contaminantes, y que puedan ser renovables en el futuro, no como los combustibles fósiles, los cuales fuera de generar bastantes residuos contaminantes, tienen sus días contados.
Dentro de estas fuentes de energía renovables y alternativas se pueden mencionar: la Solar Fotovoltaica o Fototérmica, la Biomasa bajo ambientes controlados, la Eólica, la Marítima y la Geotérmica.
Contribución de las energías limpias
Las energías limpias, contribuyen con la sustentabilidad del desarrollo humano, porque permiten su renovación en periodos cortos, son menores los daños a los ecosistemas y ambientes naturales, en favor de la generación de riqueza y empleo a los hogares
No obstante, en un análisis descriptivo sobre energías limpias y turismo comunitario, las energías limpias no solamente tienen que estar ligadas necesariamente a la actividad agrícola, lo cual, significa que la utilización de energía renovable, es una estrategia conjunta para el desarrollo humano sostenible de las comunidades locales.
Energías Limpias Y Desarrollo Tecnológico
El debate frente a las energías limpias y desarrollo tecnológico para satisfacer las necesidades de índoles tecnológicos a partir de la energía fósil.
Pese a algunos de los problemas tanto de sostenibilidad como ambientales relacionados con el proceso de utilización de la energía, se reconoce que no se puede obviar que el consumo energético permite satisfacer muchas de las necesidades básicas, entre ellas: el suministro de agua potable, iluminación, capacidad de producir, transportar y procesar alimentos, la movilidad y el acceso a la información, entre otras.
De acuerdo a esto, el centro del debate está en que para satisfacer estas necesidades se utiliza la energía fósil, la cual tiene impactos cada vez mayores en el sistema climático global. De manera que estamos ante una situación que no es fácil de redireccionar, teniendo presente que los combustibles fósiles tienen una participación central en los sistemas de producción-consumo posteriores a la revolución industrial.
Es precisamente ante los efectos negativos de la utilización de combustibles fósiles y la emisión de gases efecto invernadero, que surgen avances tecnológicos en favor de energías más limpias. Las energías limpias pretenden reducir la dependencia de los combustibles fósiles, disminuir la emisión de gases efecto invernadero y evitar problemas de seguridad ocasionados por la energía atómica, entre otros.
Lo anterior sugiere que, la utilización de energías satisface muchas de las necesidades básicas, en consecuencia, se propone generar nuevas energías limpias por medio del desarrollo tecnológico, para abastecer todas estas necesidades y así reemplazar la utilización de energías fósiles que afectan al medio ambiente con la emisión de gases invernadero.
Energías Renovales En El Contexto Mundial
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, el sector agrícola es responsable de al menos el 18% de las emisiones de gases de efecto invernadero (la ganadería representa aproximadamente el 40% de las emisiones globales).
Sin embargo, en los últimos años la ciencia y la tecnología han abordado esa problemática, y con diversos métodos y herramientas contribuyen a frenar el cambio climático. (FAO,2017). En consecuencia, esto significa que, la destrucción de la capa de ozono, explicado por el cambio climático global, comprometa a muchos países en la reducción de emisiones de CO2.
Algunas medidas como el protocolo de Kyoto o el resto de medidas políticas, resultan incompletas a largo plazo, para superar la situación ambiental y energética actual, ya que es necesario realizar un importante esfuerzo tecnológico.
Por todo ello, las energías limpias a mediados de este siglo, pueden llegar a suponer el 50% del consumo de energía primaria, de manera análoga. La problemática energética mundial, la finitud de las fuentes fósiles y su impacto al medio ambiente, implica que la estructura energética mundial no es sustentable y requiere un cambio de paradigma energético, basado en la eficiencia energética y uso de fuentes alternas como las energías limpias.
Fuentes:
Pedro Luis Ancu Sierra, Dailor José Bossa Caamaño, Alfredo José Vives Bonnett, Energías Limpias Alternativas Para El Desarrollo Organizacional, Universidad Cooperativa De Colombia Facultad De Ciencias Administrativas, Contables Y Comercio Internacional, Santa Marta – Colombia 2018
Carlos Andrés Suárez Zambrano, Energías renovables y alternativas como fuente de desarrollo económico: Determinación de un plan de negocios para el municipio de Zapatoca, Santander, Universidad Autónoma de Bucaramanga-Colombia. Facultad de Ciencias Administrativas, junio 2018